El gobierno nacional anunció la disolución definitiva del Procrear, programa creado en 2012 para facilitar el a una vivienda única familiar. Con el cierre definitivo del fondo fiduciario público, muchos se preguntan qué sucederá con los créditos vigentes, las casas en construcción, y aquellas que todavía no fueron adjudicadas.
La medida fue oficializada a través de la resolución 764/2025 y el decreto 1018/2024, donde se señala que el programa Procrear significa una “pesada carga” para las arcas públicas y que la disolución buscaba “mejorar el funcionamiento del Estado, reducir su sobredimensionamiento y transparentar el gasto”.
En el mismo texto se aclaró qué sucedería con los créditos vigentes. En ese sentido, desde el ministerio de Economía se aseguró que, luego de la disolución del fondo fiduciario, las líneas de crédito ya otorgados quedarán a cargo del Banco Hipotecario S.A. Además, expresaron que las viviendas que se encuentren en proceso de construcción quedarán a cargo de los gobiernos provinciales o municipales o, en su defecto, del sector privado.
Además, en la resolución publicada se hace referencias a informes de la Sindicatura General de la Nación que detectaron “demoras en la entrega de viviendas, falta de condiciones de habitabilidad en unidades adjudicadas, desactualización de manuales de procedimiento y dificultades para el control y fiscalización de recursos”.
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Qué sucederá con los créditos Procrear
En el texto publicado este lunes en el Boletín Oficial, el Ministerio de Economía dispuso que la gestión de estos créditos continúe bajo la istración del Banco Hipotecario, que firmará un contrato con el Estado con iguales condiciones de retribución previstas en el fideicomiso original de 2012.
De esta manera, se asegura que los titulares de los créditos mantendrán sus condiciones contractuales: monto, tasa de interés, sistema de actualización y cronograma de pago. Lo que significa que no se verán alterados los derechos y obligaciones de quiénes accedieron a las líneas de créditos.
Qué pasará con las viviendas en construcción y con las que no fueron adjudicadas
En el momento de la disolución del programa Procear, hay 17.000 viviendas que todavía se encuentran en proceso de construcción, ubicadas en distintos puntos del país, con distintos grados de avance. Luego del anuncio del fin del fondo fiduciario público, se abre la incógnita de qué sucederá con estos los desarrollos urbanísticos en edificación.
En cuanto a los proyectos urbanísticos en construcción, el gobierno nacional resolvió que la continuación y finalización de estos queda a cargo de los gobiernos provinciales, municipales, o, en su defecto, del sector privado. Los proyectos urbanísticos ya terminados del Procrear, conformados por edificios multifamiliares o viviendas tipo PH en predios,estatales— suman 85 en todo el país y equivalen a unas 18.500 unidades.
Este proceso se dio por iniciado durante el año 2024, cuando se transfirieron desarrollos habitacionales todavía a terminar a gobiernos provinciales, como Catamarca, Chubut, Corrientes, Mendoza, Río Negro, Santa Fe o la provincia de Buenos Aires. Ahora, le toca a los oficialismos de las provincias definir qué sucederá con esas obras y cómo serán adjudicadas.
Por otro lado, el gobierno nacional afirmó que las viviendas terminadas pero aún no adjudicadas podrían incorporarse al mercado por medio de ventas directas, y que no se adjudicarían más por sorteo, un elemento que caracterizó al programa Procrear.